INSTITUTO RELIGIOSO HIJAS DEL CORAZÓN DE MARÍA
SOCIEDAD HIJAS DEL CORAZÓN DE MARÍA
Una manera de vivir…
Una manera cordial de estar en el mundo.
Disponibles, el corazón universal.
En el mundo sin signos distintivos.
En comunión unas con otras.
Enviadas y responsables: en todo amar y servir.
Contemplativas en la misión.
Vivir lo esencial de la vida religiosa.
Con el vigor y la energía de los primeros cristianos.
La espiritualidad de las Hijas del Corazón de María es de filiación ignaciana, con unos aspectos propios, dados por la inspiración y experiencia de nuestros fundadores: Amor a la Eucaristía y adhesión a los Corazones de Jesús y de María, como invitación continua a modelar nuestra vida según sus sentimientos. Es propio de nuestra espiritualidad amar a la Santísima Virgen, honrarla y hacerla amar.
A partir de lo anterior se destacan cuatro rasgos:
El Corazón de Jesús, fuente de nuestra cordialidad.
Comunión Eucarística y eclesial.
Identidad Mariana.
Filiación Ignaciana.
PRESENCIA EN LA PARROQUIA Y BARRIO DE SAN PIO X
Las Hijas del Corazón de María llegaron a Murcia por la década de 1960, y fue a partir de 1971 cuando llegaran al barrio de San Pio X, un barrio en expansión que vio ampliadas sus edificaciones con la construcción de los bloques de la Colonia San Esteban.
Fieles a su carisma de estar abiertas a las necesidades de la Iglesia y del mundo vieron la posibilidad de dar respuesta a las grandes necesidades que surgían en este barrio joven y dinámico, constituido básicamente por familias trabajadoras y donde era frecuente que fueran numerosas.
Las Hijas del Corazón de María, se integraron en la vida de la Parroquia participando activamente en la liturgia, catequesis, caritas, etc.
Debido al gran número de familias jóvenes, surgió la necesidad de abrir una guardería, la cual funcionó en los bajos de la congregación durante unos 10 años. También en esos mismos bajos se atendía la formación bíblica, escuela de padres, grupos de oración, acompañamiento de niños, jóvenes y mujeres, se impartían entre otras, clases de corte y confección, mecanografía, cultura general, etc.. Se atendía a los más pequeños con una ludoteca y con campamentos de verano.
Desde entonces las Hijas del Corazón de María han continuado su presencia en el barrio adaptándose a su evolución.